lunes, 7 de noviembre de 2011

Compost casero

(Ver también la siguiente entrada: Compost casero (y 2) )

La idea es tan antigua como ingeniosa: si reciclo parte de los desechos de la casa, haré menos viajes al cubo de la basura, y conseguiré una tierra muy fértil gratis. Y es que reciclar y economizar tienen muchos puntos en común

Imagen de ACE Arquitectura, Diseño y Construcción E.U.

 Pero, ¿cómo hacer compost casero sin complicarse mucho? ¿cómo empezar? ¿qué tengo que comprar? ¿cuánto tiempo tarda en hacerse un buen compost? ¿qué resíduos sirven y cuáles no debo echar?


¿qué tengo que comprar? 
No hace falta comprar nada. Normalmente se compra o se construye una compostera, pero no es imprescindible. Se usa más que nada por estética, ya que en un jardín pequeño no es agradable dejar un montón de compost a la vista. Algunas composteras también facilitan el trabajo, por disponer de accesos  para extraer el compost de las capas inferiores, y algunas aceleran el proceso porque mantienen el calor procedente de la descomposición.

Pero también se puede hacer compost directamente sobre el suelo. En este caso se debe buscar una zona con buen drenaje, lejos de árboles que pudieran lanzar sus raices buscando humedad y nutrientes, y en un sitio cálido en invierno pero fresco en verano.

Si se hace sobre el suelo, tendremos la ventaja adicional de que las lombrices de tierra podrán ayudar al proceso de descomposición

¿cómo empezar?
El compost es el resultado de la descomposición bacteriana de restos orgánicos. Para que se inicie el proceso hace falta material rico en carbono (restos marrones de plantas) y cierta cantidad de nitrógeno (materiales verdes), oxígeno (es importante que esté aireado) y humedad (pero con un buen drenaje para evitar la putrefacción).

Si se echan ramas grandes, se recomienda ponerlas en la base, para airear el conjunto.

Cada cierto tiempo, es conveniente voltear un poco el material para airearlo y homogeneizar el proceso. Pongamos cada 2 o 3 semanas. También se debe revisar de vez en cuando que "todo vaya bien". Si el compost se está haciendo correctamente, estará húmedo, caliente (¡a unos 40ºC!), y olerá razonablemente bien (o mal, según la sensibilidad de cada cual)

  • Si huele a podrido, es que está demasiado mojado por falta de drenaje, o que hemos añadido algún resto orgánico maloliente, como carne o pescado. Es conveniente mezclar con materiales secos (hojarasca) voltear un poco y facilitar el drenaje
  • Si huele a amoniaco es que hay demasiadas hojas verdes (nitrógeno). La solución es la misma, añadir hojarasca seca y voltear
  • Si la mezcla está seca, o fría, o las dos cosas, es que no se está descomponiendo, es conveniente añadir materiales húmedos (restos de frutas, hojas verdes, cesped cortado) e incluso regar un poco
¿cuánto tiempo tarda?
 Esto es lo malo, tarda mucho, entre 3-4 meses y un año. Pero hay formas de accelerar el proceso:

  • Los desechos deben ser lo más pequeños posible. Incluso se recomienda triturar las ramas grandes y picar las hojas. Si no se tiene trituradora, al menos habría que evitar los restos más duros, como ramas gruesas.
  • Si se dispone de una buena cantidad de lombrices de tierra, es más rápido
  • Si se vigila frecuentemente para que siempre esté húmedo y a una temperatura adecuada, el proceso será más contínuo y lógicamente más rápido
  • A partir de cierto momento, no se debe añadir más material al montón. Y es que siempre habrá que esperar a que termine la descomposición de los desechos más recientes. Así que, si se tiene un montón de un tamaño adecuado, se puede empezar un segundo o un tercer montón, y luego ir usando el compost de cada montón ordenadamente.
  • Cuando se usa el compost de un montón, es conveniente retirar toda la capa superior. El compost de mejor calidad está por debajo. La capa más superficial, rica en bacterias, se puede echar sobre los otros montones (y voltear), para accelerar su descomposición

¿qué resíduos sirven?

 La base de la mezcla son desechos de jardín, tanto secos como verdes, pero se pueden añadir basuras orgánicas siempre que aporten algo a la mezcla y no provoquen malos olores:

  • Restos y mondas de frutas y verduras crudas (es conveniente enterrarlos un poco en el montón)
  • Restos de madera y serrín, siempre que sean pequeños y no contengan contaminantes, como barnices o colas, y no procedan de madera conglomerada
  • Cenizas de madera
  • Estiercol de animales herbívoros (el de carnívoros huele muy mal y es potencialmente insano)
  • Bolsitas de te (junto con las bolsitas de papel)
  • Papel de periódico, siempre que no contenga  tinta de colores
  • Cáscaras de huevo machacadas

¿y cuáles no debo echar? 
  • Restos de carne o pescado, se pudren
  • Restos de comida cocinada, pueden provocar malos olores
  • Cereales o dulces como pan o bollos, atraen a los roedores
  • Excrementos de carnívoros, especialmente si se quiere hacer un huerto, ya que pueden contener gérmenes peligrosos
  • Semillas, especialmente malas hierbas que contengan semillas, pero también desechos de huerta que puedan germinar durante la elaboración del compost... o después
  • Cenizas de carbón
  • Restos de barrer la casa (contienen metales pesados)
  • Y por supuesto, materiales inorgánicos como plásticos, cristales o latas

3 comentarios:

  1. Nosotros como tenemos a Indy, que es nuestro pollo, tenemos pocos restos de comida pero lo que si tenemos y muuuuucho, son hojas secas en el jardin. Las recogemos en bolsas de basura y antes de cerrarlas, echamos un poco de tierra y un par de lombricillas que nos hemos encontrado por el jardin. Cerramos las bolsas bien y las ponemos en un sitio donde de el sol. Y taran, en un par de meses un compost excelente y un jardin sin hojas :) Y bueno claro, unas lombricillas gorditas y felices :)

    Un beso guapa :)

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  2. Se me habia olvidado que funciona mejor si las hojas estan humedas

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  3. UF, la cacería de lombrices será para verla :D

    Me encanta la idea, la pongo en un post para ella solita,

    Gracias ;)

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